Estoy descubriendo el mundo del UX writing, ¡y me está pareciendo fascinante! Este arte relacionado con los textos de tu web o tu app te servirá para mejorar mucho la experiencia de usuario, algo con lo que saldrás siempre ganando. ¿Quieres ponerte al día? ¡Te cuento! 🙂
¿Qué es UX Writing?
UX Writing es el contenido de texto que forma parte de la experiencia de usuario en su interacción con un sitio web. Se trata de diseñar las palabras que las personas leerán o escucharán durante su interacción con un programa o una aplicación informática.
El UX writer diseña la conversación entre un producto digital y quienes lo utilizan, con la misión de reducir la fricción entre ambos. Se trata de conseguir una buena experiencia de usuario.
La experiencia del usuario abarca muchas otras cosas. Algunas de ellas, como por ejemplo las expectativas en el producto o la madurez tecnológica, no dependen del diseño ni de los textos, sino del usuario. Del lado de la web o de la aplicación, el UX writing, formará parte del diseño. Y, aunque si lo consideramos de forma aislada no tiene mucha importancia, tiene un gran peso en la experiencia de usuario.
Gracias al UX writing puedes construir relaciones y aportar confianza al usuario, enseñarle el camino que tiene que seguir, animarle a tomar acción y hacerle sentir bien, ¡a veces incluso esbozar una sonrisa! Esto último, claro, dependerá de la personalidad de la marca: el humor no funciona para todas.
¿Quieres ver un ejemplo de UX writing? Aquí tienes un pantallazo de la web de Interflora a día de hoy:
Y aquí tienes un pantallazo del mismo sitio web en el año 2016. Como ves, no hace falta ir muy lejos en el tiempo.
Las diferencias son evidentes, ¿verdad? Me he atrevido a hurgar en el histórico de Interflora sin pedirles permiso porque es un buen ejemplo, un caso en el que se está aplicando buen UX Writing. ¿Te fijas como las palabras de la página actual «hablan» con el usuario?
El UX Writing NO está enfocado a la venta, ¡pero vende!
La versión antigua de la página está mucho más enfocada a la venta. Y, aunque el proceso de elegir un ramo y pagarlo era, por lo visto, bastante sencillo, apetece mucho más comprar en la nueva página, ¿no te parece? Y es que el UX writing no se crea para vender… ¡pero vende!
En la página antigua te ponían el precio y el producto de forma clara. Sugiere algo así como «esto es lo que tenemos y esto es lo que cuesta». Sin embargo, en la versión nueva de la página, el usuario está en el centro. Te van a ofrecer lo más adecuado para ti, porque eres tú el que manda. Con sólo tres clics ya habrás seleccionado de forma bastante precisa lo que necesitas. Por si no quieres pensar, el botón «ver los mejores» es una llamada a la acción clara, prometedora, ¡y muy cómoda! Esto es el concepto de «poner el usuario en el centro» hecho imagen:-) ¡Así se hace, amigos de Interflora!
¿Qué sucede cuándo el usuario está cómodo en un sitio web o en una aplicación? Está claro: permanecerá más tiempo, interactuará más y aumentarán las posibilidades de que convierta. Si le guías de forma clara y le simplificas los pasos para que complete el proceso que haya venido a hacer, no sólo se cumplirán sus objetivos: ¡también los tuyos!
Y más: cuando el usuario consigue fácilmente y de forma amena lo que ha venido a buscar, es seguro que volverá siempre que necesite algo como lo que ofreces. A veces, puede que vuelva incluso si no lo necesita 🙂
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Buenas prácticas
Crear los textos encaminados a ofrecer una buena experiencia de usuario puede parecer fácil a primera vista. Pero no, no basta con imaginarse una conversación con el usuario, ¡ojalá fueses tan simple! Es es imposible mantener una conversación fructífera con el usuario si no sabes quién es. Si además no has definido bien quién eres tú, no es difícil: es imposible.
Para que el UX writing de tu web o de tu app sea efectivo, antes de ponerte a diseñar la experiencia, necesitas:
- Tener claras las metas de tu empresa y el objetivo que persigues en cada punto de interacción con el usuario.
- Conocer bien los diferentes tipos de buyer persona que componen tu público.
- Definir la voz y el tono de tu marca. Si dispones de una guía de estilo, mejor.
Todo esto tiene que estar muy claro antes de empezar a escribir o a diseñar ninguna experiencia o recorrido del usuario por tu web o app.
Otra buena práctica a tener en cuenta es tener siempre presente el contexto: ¿cuál será el marco de tus palabras? ¿Qué espacio tienes disponible? ¿Qué colores, imágenes y elementos habrá alrededor?
La única forma de asegurarte de que el diseño encajará con el texto es tenerlo presente durante la creación del mismo. Lo ideal es que el UX writer trabaje codo con codo con el equipo de diseño si es posible. En caso de que no lo sea, al menos deberá crear sus textos sobre un mockup o una reproducción lo más fiel posible al diseño final.
Además, los textos en los que se aplican buen UX writing deben ser claros, breves y muy útiles para de ayudar al usuario a avanzar en lo que sea que ha venido a hacer a tu sitio. La idea es facilitarle el trabajo al máximo: si puedes expresar lo que quieres decir en cinco palabras, no pongas 10. Y si has puesto 10, dale un par de vueltas hasta que tengas claro que no incluye absolutamente nada prescindible.
Los textos de microcopy deben ser conversacionales, como si quien está interactuando con el usuario no fuese una aplicación o un sitio web sino una persona. Escribe mensajes positivos y amables, que vayan al grano y, si el estilo de la marca lo permite, que sorprendan al usuario por su frescura y cercanía.
¿Conoces algún ejemplo de UX Writing bien aplicado? Por favor, ¡compártelo en los comentarios! Así aprendemos todos… Y gracias por leer hasta aquí 😉
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